Según la extraña teoría de un físico de EE.UU., una antigua civilización marciana fue destruida con bombas nucleares por extraterrestres, que -advierte- podrían también atacar la Tierra.
John E. Brandeburgo, físico de plasma en la compañía de tecnologías orbitales ('Orbital technologies'), viene sosteniendo desde 2011 que el color rojo de Marte se debe a una explosión de origen termonuclear. "La superficie de Marte está cubierta de sustancias radiactivas como el uranio, el torio y el potasio radiactivo. Una explosión nuclear podría haber dejado residuos en todo el planeta", dijo entonces a Fox News, presentando su extraña teoría.
Desde entonces, el científico ha profundizado en su idea, según la cual la explosión fue causada por una raza extraterrestre inteligente, informa 'Daily Mail'.
La conclusión de su último informe sostiene que los isótopos nucleares de la atmósfera de Marte se asemejan a las pruebas de bombas de hidrógeno, lo que, según su teoría, demuestra que estamos ante "un ejemplo de civilización destruida por un ataque nuclear desde el espacio".
Su investigación se basa en la alta concentración de Xenon-129 en la atmósfera marciana y el uranio y el torio encontrados en la superficie por la nave espacial de la NASA Odyssey.
De acuerdo su teoría, Marte contaba con dos civilizaciones humanoides antiguos. Según el físico, que incluso revela sus nombres: Cydonians y Utopians, estas razas alienígenas tenían un nivel de tecnología similar a la de los antiguos egipcios.
Por su parte, los científicos señalan que la aparición de estos elementos en Marte no es sorprendente, ya que son elementos naturales que se encuentran en todas partes.
El físico sostiene que antes de la explosión, Marte presentaba un clima similar al de la Tierra, igual que la vida vegetal y animal.
Esta versión, según afirma, lleva a pensar que nosotros también deberíamos temer un ataque contra nuestro propio planeta, por lo que debería organizarse una misión tripulada a Marte para saber a qué nos enfrentamos.
John E. Brandeburgo terminó la carrera en la Universidad de California Davis, pero, según indica el portal de tecnología, "ha apostado su reputación a esta teoría de la destrucción nuclear de Marte", que muchos consideran pseudociencia.